El valor de la producción láctea de todas las especies lecheras supone el 17,7% de la producción ganadera en España.
En términos de valor económico, la leche de oveja se situaría en torno a los 605 millones de euros, y la leche de cabra en torno a los 396 millones de euros.
Este sector y sus ganaderos tienen un papel primordial en la vertebración del territorio, en la conservación del entorno y en la generación de empleo en zonas rurales, pero el liderazgo de España en el ovino y el caprino de leche se ve amenazado por la falta de competitividad y por los nuevos modelos de producción de los competidores europeos.
Aunque estos ganaderos están percibiendo buenos precios por la materia prima, la producción nacional está disminuyendo. Países con nuevos modelos productivos, como es el caso de Holanda en el caprino de leche, están poniendo en riesgo el liderazgo de España.
Falta relevo generacional
El precio es crucial, pero otros aspectos estructurales y sociales, como la falta de relevo generacional o las nuevas exigencias europeas en materia de sostenibilidad ambiental, van a determinar el futuro de la ganadería española de ovino y caprino de leche de España.
Es el caso de César Ortega, agricultor y ganadero ovino en la zona de Villoldo (Palencia) desde hace 37 años. Su hijo pequeño, Cristóbal, de 21 años, está iniciando los trámites para dedicarse al oficio de su padre.
Las desventajas del sector
Su hijo tiene vocación, pero la dependencia del sector, las condiciones de trabajo y la escasez de modernización le han llevado a dejar de lado la ganadería y optar por la agricultura.
La explotación ovina de los Ortega necesitaría modernización y si Cristóbal quisiera incorporarse tendría que hacer una inversión importante. “Llevar una ganadería de 3.000 o 6.000 ovejas es más sencillo porque trabajan cinco o seis personas, y puedes tener tus días libres. Pero la nuestra es de unas 200. Yo busco calidad de vida y creo que la ganadería no me daría lo que me dará la agricultura”.
Todos estos factores son los que están provocando que los jóvenes tengan que dejar de lado este sector y que los hijos de ganaderos no decidan dar continuidad a las granjas de sus padres, lo que hace peligrar a la supervivencia del sector.
Comments